top of page
  • Facebook
  • X
  • Youtube
  • Instagram
Suscríbete a nuestra Newsletter
y no te pierdas nada!
alumnos de la clase de jazz de la escuela de baile y comedia musical  Coco Comin durante la celebración del festival en Junio de 2024 en Barcelona.

Horario de Secretaría

De septiembre a junio:

De lunes a viernes de 9:00 h. a 22:00 h.
Sábados de 10:00 h. a 15:00 h.

Julio:

De lunes a jueves de 10h a 22h. Viernes de 10h a 15h.

Agosto:

Cerrado por vacaciones.

El Jazz como disciplina de danza.

El Jazz como disciplina de danza no es lo que crees.


Vamos a dejar claro de una vez por todas qué es el baile de Jazz.


La danza Jazz son palabras mayores. El Jazz como disciplina de danza es algo muy distinto a lo que figura en la publicidad y programas de las escuelas de baile. No se trata de ejecutar pasos de baile sobre cualquier música moderna, del siglo XX o XXI. Ni tan sólo ejecutar pasos de baile sobre temas de Musicales de Broadway. La Danza Jazz sólo es válida si se ejecuta sobre el estilo musical denominado “Jazz”.


Por tanto, el término Broadway Jazz sólo debería aplicarse a coreografías de aquellos musicales basados en la música de Jazz. Aquí os dejo algunos títulos teatrales:  "Ain't Misbehavin’” "City of Angels",  "Bandstand", "The Glenn Miller Story","All That Jazz","Stormy Weather", "The Glenn Miller Story","All That Jazz","Cabin in the Sky", "Chicago". En el cine: "Swing Time", "Shall We Dance","Top Hat", "An American in Paris","On the Town”, "Singin' in the Rain"... Aunque no soy admiradora de esta película, no puedo dejar de nombrar a "La La Land".


Estos musicales no sólo homenajean el jazz, sino que también lo integran en sus narrativas y estilos coreográficos.


Muchos obras de teatro musical actuales utilizan bandas sonoras de diversos estilos musicales: pop, rock, elementos de soul, funk, hip hop y R&B. Por lo tanto, cualquier ejercicio de danza basado en estos estilos no deberían denominarse “clase de jazz”.


Es sumamente delicado y complejo coreografiar danza jazz. El conocimiento profundo de su música es la primera condición que debería exigirse a cualquier profesor que se atreva a encarar este tema y publicitarlo como tal. La cultura musical del maestro es una pieza clave.  


La coreografía de jazz debe incluir como elemento básico el “swing”, un característico ritmo fluido y ondulado. Las síncopas, los contratiempos, la interacción o diálogo entre todos los músculos del cuerpo que se complementan, son también esenciales. El bailarín debe aportar su estilo personal dentro del grupo, permitiéndose incluso improvisar. La riqueza de movimientos que nacen del abdomen y que se traslada fluidamente hacia las extremidades, confieren soltura y libertad también a los hombros, los cuales añaden expresividad a la interpretación.


Pero no nos confundamos, el jazz no es flojedad, no es laxitud. Es un baile dinámico y poderoso. Es un sabio paseo del bailarín por la música como si de un miembro más de la banda se tratara. No hay que perder el compás, el ritmo y la precisión. Nos fusionamos con la sección rítmica, con batería, contrabajo, guitarra y piano, sí, pero nuestra expresividad se adapta a la narrativa de la letra y a las blue notes.


Mi consejo al bailar jazz: No ejecutes pasos de danza jazz sin alma. No te conviertas en un mero ejecutor de variaciones sin respetar las leyes eternas del jazz, de sus elementos y de su ADN. En ese caso sólo te aprovecharás del término Jazz sin entender ni comunicar nada de nada.


Bailar jazz con el cuerpo rígido, tenso, duro, firme, estirado, envarado, sin romper la estructura corporal es un atentado contra la necesaria progresión de movimientos que exige esta disciplina. No importa la cantidad de pirouettes que seas capaz de hacer, no importa la elevación de las piernas hasta la altura de los ojos, nada de eso tiene importancia si no entiendes la gran riqueza de la música de jazz y lo que te exige como profesor o intérprete.


Como bailarín de jazz no puedes parecer seco, arrogante, orgulloso, presuntuoso, vanidoso ni adusto.


Llamar Danza Jazz a cualquier coreografía basada en otro estilo musical es un oportunismo comercial que confunde a los estudiantes y al público.


Y para terminar, mi consejo es que, siempre que tengas oportunidad cuando salgas al extranjero, trabajes con maestros afroamericanos y evites las clases de "postureo", tan de moda actualmente.


Coco Comin.


La maestra comunica su pasión por el baile y la música de jazz a sus alumnos.
Coco Comin en clase de Danza Jazz

La transmisión de la pasión por el Jazz, la música más culta del siglo XX.


bottom of page